Siena

Vamos a dedicarle unos días a esta bonita ciudad medieval situada sobre unas colinas, y que durante mucho tiempo rivalizó con su vecina Florencia en belleza e historia. Fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y es considerada una de las ciudades más bellas de la Toscana e incluso de Italia.

Como todas las ciudades que nos vamos encontrando en este recorrido, no es posible circular en coche por su centro histórico, rodeado también de murallas, así que lo mejor es dejar el coche aparcado en alguno de los parkings que se encuentran a las afueras. Por ejemplo en la zona sur de Siena hay un pequeño aparcamiento gratuito junto al Cementerio Municipal, en la Strada Laterina . Es una de las zonas más convenientes para visitar el centro histórico, a solo 15 minutos a pie de la plaza principal de Siena, Piazza del Campo. Se suele llenar rápidamente. Otro aparcamiento gratuito cercano es Il Campino. Y ya otra opción es aparcar en zona de línea azul y pagar en el parquímetro el tiempo que vayas a estacionar.

Aquí detallamos los imprescindibles de Siena para no perdernos nada:

Es la plaza principal y el corazón de Siena. Tiene una forma como de concha de ladrillos rojos y se encuentra rodeada de bellos palacios y edificios medievales. Es aquí donde se celebra el famoso Palio de Siena. En esta fiesta, todos los barrios de la ciudad (17 contrade), compiten dos veces al año (el 2 de julio y el 16 de agosto) en la conocida carrera de caballos de origen medieval para conseguir el palio o banderín. Su rivalidad es palpable durante todo el año y al pasear por las calles de Siena verás los diferentes banderines que señalan en qué barrio te encuentras.

Aparte de disfrutar de la plaza en sí y de su ambiente, o sentarte en el suelo para disfrutar al máximo de ella, hay varios puntos muy significativos dentro de la plaza que tienes que tener en cuenta:

• La Fuente Gaia, una gran pila de mármol rectangular adornada de bellos bajorrelieves, que fue construida en el siglo XV como parte del sistema de acueductos de Siena.
• El Palazzo Publico, que fue diseñado en el siglo XIV como sede neutral del gobierno de la ciudad, en lugar de las iglesias o palacios nobiliarios que antes se utilizaban. Hoy es el Ayuntamiento de la ciudad, con muchas de sus salas recubiertas de maravillosos frescos. También es la sede del Museo Civico de Siena, donde se exponen importantes obras y objetos históricos.
• En el mismo Palacio Público se encuentra la bella Torre del Mangia, un campanario de casi 100m de alto al que se puede subir a través de sus cientos de escaleras (505) y desde donde se obtienen unas maravillosas vistas panorámicas de toda la ciudad de Siena y alrededores.

En esta magnífica plaza se encuentra el conjunto monumental de la Catedral de Siena, que también incluye el Baptisterio de San Giovanni, el Museo dell’Opera del Duomo, la Cripta y el Facciatone.

La Catedral o Duomo es una de las más bonitas de Italia. Aparte de su impresionante fachada, con sus tres arcos y un gran rosetón, su interior está lleno de importantes obras de arte de Bernini, Donatello y Miguel Angel, entre otros. Una de las cosas por las que más se caracteriza esta Catedral es por tener el suelo de mármol completamente cubierto de representaciones de escenas bíblicas. Para preservarlo sólo lo dejan descubierto en la época de verano, entre junio y octubre, momento en el que se puede ver en todo su esplendor. Dentro se encuentra también la magnífica Biblioteca Piccolomini, llena de libros antiguos y cubierta de frescos maravillosos sobre la vida del Papa Pío XII.

Justo detrás de la Catedral se encuentra el Baptisterio, de una gran belleza, donde donde se bautizaba la población en el siglo XIV. Se puede visitar y contemplar su magnífico interior. En centro se encuentra la Fuente bautismal en bronce y mármol, en la que trabajaron los artistas italianos más importantes de la época.

NOTA: Si se quieren visitar algunos de estos puntos de interés, existe un único pase para ver el Museo, la Catedral, el Baptisterio, la Cripta y Il Facciatone con el mirador, se llama OPA SI PASS, y se puede comprar en internet o en las mismas taquillas de la Catedral, situadas en el lateral izquierdo de la misma. Además sirve para 3 días, así que no se tiene porqué visitar todo el mismo día si no se quiere. Cuesta 16 euros (2025)

Otro bonito Palacio de estilo gótico que actualmente alberga una colección de arte privado y un museo de instrumentos musicales. Hoy en día es la sede de la prestigiosa Accademia Musicale Chigiana, una de las escuelas de música más prestigiosa del mundo. Tiene una fachada en curva a varios niveles y se puede visitar su bonito patio porticado con un pozo en el centro.

Enfrente del Duomo se encuentra este antiguo hospital medieval. Aparte de atender a los pobres y enfermos, servía de lugar de parada para los peregrinos que iban por la Vía Francigena hasta Roma. Hoy en día es un importante museo que nuestra la transición de varias épocas. En su interior se pueden visitar varias salas, capillas y oratorios, donde la más importante es la Sala de los Peregrinos con frescos del siglo XV.

Es uno de los museos más antiguos de Italia, fue fundado en 1869, y en su interior guarda las obras artísticas de la Catedral y de otras iglesias de la diócesis. Desde este museo se puede acceder a la “Il Facciatone‘, fachada de la que iba a ser la antigua catedral, más grande que la actual y que quedó inacabada. Desde aquí, subiendo por unas escaleras estrechas unos 200 escalones se llega a un mirador desde el que se tiene una de las mejores vistas de Siena, 360º.

Otra de las bonitas vistas panorámicas de la ciudad se tienen desde esta Basílica del siglo XIII. De estilo gótico y de aspecto sobrio, tiene en su interior obras de arte de mucho valor. Es conocida sobre todo por albergar la cabeza de Santa Catalina, patrona de la ciudad, y por eso es un lugar de culto y de peregrinación en Siena.

Esta pequeña plaza está rodeada de imponentes edificios y Palazzos, lo que refleja su importancia durante la época de esplendor de Siena. Pero sin dude la estrella de la plaza es el Palazzo Salimbeni, actualmente sede del Banco Monte dei Paschi de Siena. De estilo gótico fue construido ampliando la ya existente residencia de la poderosa familia Salimbeni, dedicada a la banca y el comercio. En el centro de la plaza se encuentra la estatua de Sallustio Bandini, un humanista y filántropo que tuvo mucho que ver con el desarrollo cultural de Siena.

A unos 5 minutos caminando desde la Plaza del Campo se llega a este bonito santuario, levantado alrededor de la antigua casa de la familia Benincasa, donde nació la Santa. Consta de varias plantas, pórticos, oratorios, estancias donde Santa Catalina dormía o rezaba, e iglesias de distintas épocas. Destaca la Iglesia del Crucifijo, que alberga el crucifijo de madera del que Catalina recibió los estigmas.

Al salir del santuario se puede disfrutar de unas vistas únicas del centro histórico de Siena con sus tejados rojos de los que sobresale la Catedral recorriendo la Via Camporegio.

Conocida como Il Tartarugone, debido a que su estructura de arcos del siglo XIX parece un caparazón de tortuga. Es una de las plazas que visitar en la ciudad. Cada domingo se celebra el mercado y se llena de gente que viene a comprar productos frescos y de temporada, creando mucho ambiente en esos días. Se encuentra detrás del Palacio Público.

Fue construida en el siglo XIII y fue un lugar de culto y peregrinación. Es conocida sobre todo porque alberga en su interior la cabeza incorrupta de Santa Catalina y varios frescos sobre la vida de la Santa.

Si se tiene tiempo, a un par de horas de Siena, al sur en la región de Maremma, se encuentran las Termas de Saturnia (Cascate del Mulino), unas termas con aguas a 37 ºC todo el año y que son de acceso gratuito. Se componen de varias cascadas en diferentes niveles y es una visita muy recomendable, no sólo por las propiedades terapéuticas sino también por la belleza del entorno. Se deja el coche en el parking y se va caminando hacia las cascadas. Existe un bar junto a las termas que también ofrece comida.

Siena nos pareció una ciudad increíble, con mucha vida y un centro histórico precioso. Nosotros nos alojamos justo fuera del casco histórico, por lo que no necesitamos de los parkings del interior y cada día íbamos caminando por el centro, muy manejable. La última noche cenamos en un sitio encantador y 100% recomendable, la Osteria San Martino, un lugar pequeñito bien decorado con una comida de mucha calidad y especialidades locales.